La ropa de cama es el elemento principal de la decoración de un dormitorio. Sábanas, mantas, colchas, edredones, fundas nórdicas, fundas de almohada, cojines, boutis, coprilettos, mantas,… todos estos textiles te ayudarán a aportar color y calidez en las habitaciones.
Para elegir la ropa de cama, lo más aconsejables es que si el resto de la decoración de la habitación como el mobiliario, los complementos, las cortinas o las paredes tienen mucha personalidad optar por ropa de cama en colores lisos y tonos uniformes e incluso suaves para que el conjunto no quede muy recargado.
Si por el contrario se ha optado por adquirir unos muebles sencillos, podemos ser más atrevidos con la ropa de cama y que cobre todo el protagonismo de la decoración. Esta opción es la más adecuada para poder cambiar a menudo de estilo o de apariencia del espacio ya que eligiendo varios conjuntos de ropa de cama podremos cambiar de un modo rápido, fácil y económico el aspecto de la habitación. Es más complicado hacer lo mismo si los muebles son los protagonista, ya que cambiar el mobiliario o la decoración de las paredes es algo que se suele realizar cada cierto tiempo.
Dependiendo de tu personalidad optarás por una opción u otra. Este consejo se hace extensible para la decoración del resto de la casa, podemos ser arriesgados y atrevidos con los textiles porque es un elemento fácilmente reemplazable o sustituible.
Ropa de cama con estampados románticos
Ropa de cama monocolor
Ropa de cama juvenil
Ropa de cama infantil